Entre los días 4 y 10 del pasado diciembre, la Comisión de Inclusión Social, Democracia Participativa y Derechos Humanos (CISDPDH) estuvo en París y su periferia, en ocasión del Consejo Mundial de CGLU y de la COP21. Las actividades realizadas y los encuentros entre gobiernos locales y movimientos sociales permitieron consolidar los mensajes y las alianzas para territorios justos, democráticos y sostenibles.
En este artículo encontrará los enlaces a los vídeos y las actas de las sesiones organizadas:
Entre los días 4 y 10 del pasado diciembre, la Comisión de Inclusión Social, Democracia Participativa y Derechos Humanos (CISDPDH) estuvo en París y su periferia, en ocasión del Consejo Mundial de CGLU y de la COP21. Las actividades realizadas y los encuentros entre gobiernos locales y movimientos sociales permitieron consolidar los mensajes y las alianzas para territorios justos, democráticos y sostenibles.
En esta circular encontrará los enlaces a los vídeos y las actas de las sesiones organizadas:
1. “De la COP21 a Hábitat III: gobiernos locales y ciudadanos en el centro de los desafíos” (Saint-Denis, 5 de diciembre): sesión abierta del Consejo Mundial de CGLU. Más de 200 representantes de gobiernos locales, ciudadanía e investigadores lanzaron mensajes muy claros: la lucha contra el cambio climático para por la justicia social; es necesario repensar la forma como se construyen y desarrollan los territorios para alcanzar la plena sostenibilidad ecológica social y democrática.
- Aquí puede recuperar el vídeo de la sesión.
- Aquí puede acceder al álbum de fotos del evento.
2. “Transición Ecológica y Derecho a la Ciudad” (Montreuil, 5 de diciembre): la Comisión, en asociación con Habitat International Coalition, llevó la cuestión del Derecho a la Ciudad a la agenda de la Cumbre de los Pueblos por el Clima, en ocasión de un debate abierto que incluyó ciudadanía local, movimientos sociales, electos locales e investigadores. La alianza entre gobiernos locales y sociedad civil se manifestó como elemento clave para limitar las consecuencias climáticas de la urbanización creciente del mundo. El derecho a la ciudad, al realizar una repartición de los recursos urbanos y en la medida que se enfoca a asegurar el bien vivir común en la ciudad, permite alumbrar un nuevo paradigma hacia una urbanización solidaria y sostenible.
- Aquí puede acceder al acta del debate.
3. “La transición ecológica en las periferias populares: una prioridad para reducir las desigualdades sociales” (Le Bourget, 8 de diciembre): a iniciativa del Consejo Departamental de Seine-Saint-Denis, el espacio oficial de la COP21 acogió un evento paralelo sobre la vulnerabilidad de los territorios populares de periferia frente al cambio climático y sobre las oportunidades de la transición ecológica en términos de inclusión social.
- Aquí puede acceder al acta de la mesa redonda.
4. “De la COP21 hacia Hábitat III: redes de ciudades y ciudadanos comprometidos con los desafíos globales” (París, 10 de diciembre): la Fondation pour le Progrès de l’Homme organizó una conversación entre fundaciones europeas y americanas que trabajan por ciudades sostenibles y redes de gobiernos locales. En ella que se expresó la necesidad de trabajar conjuntamente de cara a Hábitat III para conseguir ciudades justas, solidarias y sostenibles.
- Aquí puede acceder al acta del debate (sólo versión inglesa).
Hacia perspectivas de acción comunes a nivel local
Las actividades realizadas durante la COP21 y el Consejo Mundial de CGLU permitieron consolidar el movimiento global por el Derecho a la Ciudad y reforzar la red que trabaja por su implementación concreta en tanto que paradigma necesario para conseguir territorios justos, democráticos y sostenibles. Además, permitió constatar que existe un movimiento de gobiernos locales que, junto con la sociedad civil, están determinados a actuar por la justicia climática y social. Este movimiento pretende contribuir, mediante sus mensajes, a la Agenda Mundial del Hábitat, que será definida en la Conferencia de Hábitat III (los próximos 17 a 20 de octubre en Quito), y, de allá, pretende constituir el derecho a la ciudad como necesidad por una urbanización sostenible del planeta.