Ames (La Coruña)

¿Por qué los gobiernos locales y regionales son esenciales para promover, cumplir y respetar los derechos humanos? 

Porque somos las administraciones más cercanas a la ciudadanía y por lo tanto los que más podemos influir en cuestiones tan importantes ya que somos los que mejor conocemos la situación y necesidades de nuestros vecinos/as así como los primeros perceptores de sus demandas. Los Ayuntamientos, por lo tanto, somos los que más podemos influir en la vida de nuestros vecinos promoviendo iniciativas que lleguen de una forma más eficaz. 

¿Por qué los derechos humanos son valores relevantes y un marco útil para guiar su acción local? 

Los derechos humanos establecen las bases para la libertad, la justicia y la paz en el mundo, según la Declaración Universal de Derechos Humanos, adoptada por la Asamblea General de las Naciones Unidas en 1948.  Respetarlos, protegerlos y hacerlos cumplir nos convierte en una sociedad más igualitaria y por lo tanto más libre, más saludable. Es responsabilidad de los gobiernos locales conseguirlo y para ello debemos informar y concienciar a nuestra vecinanza acerca de sus derechos y de su cumplimiento así como permitirles participar en aquellas decisiones que les afectan. Las políticas con un enfoque basado en los derechos humanos deben centrarse principalmente en los grupos de población que son objeto de una mayor marginación, exclusión y discriminación. Este enfoque puede requierir de un análisis de las normas de género, de las diferentes formas de discriminación y de los desequilibrios de poder a fin de garantizar que las intervenciones lleguen a estos segmentos de la población. 

Este enfoque tiene que ver no solo con los resultados sino también con el modo en que se lograrán poniendo en el centro a la persona como agente que interviene en su propio desarrollo, en lugar ser un mero espectador y/o receptor pasivos de servicios. 

Informar, sensibilizar, educar y empoderar a estos agentes es fundamental ya que su participación es esencial, no solo para garantizar la consecución de los objetivos propuestos, sino también para mantenerlos y reivindicarlos.